martes, 12 de enero de 2010

“Aprendo de tí.”

Si te sientas bajo un árbol un momento,
Y observas a tu alrededor atento,
Entenderás lo que yo aprendo,
Cuando lo único alrededor mío es el viento.

Si escuchas a los árboles cantar,
No te preocupes por amar,
Todo llega a su tiempo,
Preocúpate por soñar.

Pero...
Cómo negar que tu presencia cambió mi vida?
Cómo probar que tus palabras iluminaron mis días?
Cómo hacerte entender que me hiciste sentir?
Cómo explicarte, con palabras, verte venir?

Con tu sonrisa, delicada, me enseñaste.
Con el roce, de tus manos, me mostraste.
Con la miel, de tus labios, me llevaste.
Con tus palabras, dulces, me enamoraste.

Un momento, una persona, te enseña,
Una canción, una sonata, te llena,
Pero esa ocasión perdura en la eternidad,
Así como mi poesía, dura realidad.

Enero, 2010.