solamente porque así lo decidí,
pero sí ha sido consciente
el porqué te decidí escribir.
Te he estado viendo,
y del amor aprendiendo,
y no he podido poner en papel
todo lo que me has enseñado a ver.
He estado sintiendo por primera vez
mucho de lo que había leído sin querer,
pero no supe manejar este huracán de emociones
que ha sido compartir con vos todas mis estaciones.
Es increíble la belleza que te rodea,
cómo me enamora la sonrisa que la que caminas,
y cómo logras hacer de la vida
algo más, mucho más, que un conjunto de días.
Y ahora ya ha sido suficiente,
y es necesario sacar de mi mente
todo lo que siento en mi corazón,
porque sencillamente ya rebosa de amor.
Por eso, hoy te escribo.
