Nunca la lluvia se vio mejor
Que al caer sobre tu sonrisa, amor.
Nunca soñé tanto brillo en el aire,
Que al verte venir, esperándote.
No tengo idea de cómo lo haces,
Cómo me vuelves loco con tus artes,
Cómo deseo respirar tu piel, tocarte,
Tus labios… tus nervios… besarte.
Me tiemblan las manos, tenerte cerca,
Me nervia el corazón sentir tus penas,
Dime qué hiciste para transformarme,
Para que yo, de por vida, siga amándote.
Te escribo para que no me olvides.
Aunque hayamos vivido un solo momento
Aún cuando te creo lo que me dices;
Porque lo que siento, perdura en el tiempo.
Abril, 2010.
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